viernes, 12 de julio de 2013

El Downtown, una ciudad llena de pueblos

De los cinco condados que forman Nueva York el que concentra mayor número de atractivos turísticos y del que muchos de los viajeros, que visitan la ciudad más famosa del mundo, no salen es Manhattan. Se trata de una gran ciudad llena de pequeños pueblos y a su vez, tanto para moverse por metro como transitar la ciudad es importante conocer dónde se encuentran los lugares que deseamos visitar, en el Alto Manhattan (Upper Manhattan - Uptown), en el Bajo Manhattan (Lower Manhattan - Downtown) o en la cuadrícula perfecta que forman calles y avenidas en el corazón de esta isla. Les dejamos este mapa de situación para que se sitúen en referencia a nuestra aventura por Manhattan.

Nosotros nos hemos movido por todos los condados y los principales puntos del condado más transitado y famoso, a un ritmo vertiginoso y es que lo que está claro es que Nueva York no lo podrás conocer ni visitar todo en menos de una semana.

Comenzaremos con el Downtown, al que ya habíamos acudido para visitar los condados de Staten Island, ya que sale el Ferry desde el sur de Manhattan, Brooklyn situado en la parte sureste de la isla, para el vuelo en helicóptero o el paseo en barco nocturno.

A las 10 de la mañana nos encontrábamos en la Zona Cero. Habíamos conseguido, tras informarnos, acceso a la primera visita al "9/11 memorial". Para ello hay que realizar una donación y a través de la página oficial (http://www.911memorial.org/) obtener la reserva para poder acceder y evitar colas de varias horas, además de poderte quedar sin visitarlo debido al cupo diario que tiene visitar esta zona. Hay una fecha marcada en el corazón de los neoyorkinos y también en el de la civilización. El atentado terrorista que sufrió el país, con el impacto de 4 aviones en territorio norteamericano, sobrecogió al mundo convirtiéndose en una de las fechas más nefastas de la Época Contemporánea. Son pocos los humanos que no recuerdan qué hacían y cómo vivieron aquel 11 de Septiembre de 2001 en el que dos aviones impactaron con las Torres Gemelas, uno contra el Pentágono de Washington y el último finalmente en un descampado gracias a la sublevación de los viajeros del cuarto avión que fue asaltado. Aquel día la ficción apocalíptica de las películas de Hollywood se tornó en una real pesadilla, en un trágico escenario, sin actores y sin directores pero con miles de personas corriendo por las calles sin rumbo víctimas del pánico. Desde esa fecha Nueva York no es la misma, su skyline tiene el vacío que dejaron sus edificios referentes, pero sobre todo esta gran ciudad siente la ausencia y el dolor de la pérdida de 2983 personas que fallecieron por el ataque terrorista. Actualmente sigue muriendo gente por la inhalación o contacto de sustancias nocivas mientras ayudaban en la zona del atentado, calculándose que la cifra, entre directos e indirectos, alcanza cerca de los 4.000 fallecidos.


En el World Trade Center se erige este Memorial 9/11 en honor y recuerdo de los fallecidos. Dos piscinas, que cuentan con las mayores cascadas artificiales en la región de Norteamérica, se han colocado en el lugar que antes ocupaban las Torres Gemelas. Los nombres de todas las personas que perdieron la vida en los atentados están inscritos en los paneles de los bordes de la piscina. Dedicarle 5-15 minutos a reflexionar en este lugar te puede llevar a darte cuenta de la magnitud de esta catástrofe de la que muchos neoyorkinos no dudan en reconocer que debieron necesitar ayuda psicológica durante años por las impactantes imágenes que vieron, el terror, miedo y pánico que sufrieron.




Abandonamos el Memorial para seguir visitando la ciudad y nos dirigimos al distrito financiero. Wall Street, dos términos, un nombre,  que muchísimas veces hemos oído en las noticias sobre todo en esta época de crisis mundial. Es el centro y capital financiera del mundo. En los edificios de esta estrecha calle trabajan 24 horas sin parar, con diferentes turnos y adaptándose a los diferentes husos horarios, para tener plena vinculación con la Bolsa de Valores de Nueva York.




A unos minutos a pie se encuentra el Toro de Wall Street. Esta escultura de bronce de 3.200 kgs de peso representa el optimismo, agresividad y bonanza financiera. Se ha convertido en una de las imágenes más fotografiadas de la ciudad, tanto es así q ue es prácticamente imposible obtener una fotografía o imagen completa del toro sin que hayan turistas a su alrededor. Se dice que hay que tocarle el hocico y los testículos para tener suerte y prosperidad económica, así que nadie duda en hacerlo por poco supersticiosos que sean.



Seguimos por el Bajo Manhattan, visitando sus barrios. En ocasiones pasear por esta zona de Manhattan te lleva hasta otros países y es que hay auténticas concentraciones y réplicas de la vida cotidiana que podrías tener en ellos. Destacan principalmente China Town y Little Italy, donde es parada obligatoria comer una exquisita pizza. Nosotros lo hicimos mientras esperábamos que la lluvia nos diese una tregua.






El Soho fue nuestra siguiente parada en la que muchos se asombran como te intentan vender todo tipo de artículos incluso metiéndote en laberintos subterráneos. Los amantes de las compras pueden encontrar gangas y réplicas en sus calles, pero como no tenemos casi tiempo evitamos que nos liasen y preferimos acabar la visita por la zona baja de Manhattan haciendo un poco de deporte. Nos han contagiado su pasión por el deporte y estar en forma, así que no dudamos en coger la ropa deportiva y tirar unos cuantos tiros en las canchas de estos barrios de los que han salido varios jugadores de NBA y que no se atreven a visitar por miedo a ser humillados.





Se hizo de noche y volvimos hacia el hotel para comenzar con nuestra visita por el Midtown, pero de eso le hablaremos mañana junto al resto de actividades, monumentos y lugares que visitar en esta región en la que se concentran la mayoría de ellos. Ahora nos toca descansar los pies que nos arden de tanto caminar, la ciudad lo merece y nosotros, aunque estemos agotadísimos, estamos ansiosos con seguir perdiéndonos en las calles de esta ciudad que nos ha enamorado.


No hay comentarios:

Publicar un comentario