lunes, 19 de agosto de 2013

Del fin del mundo a las profundidades marinas...

          ¡Muy buenos días a todos nuestros seguidores! Hoy hemos madrugado para ir a uno de los sitios de visita obligada para todo turista que viaje a A Coruña: el Cabo de Finisterre.
Este lugar inspira títulos diversos: el sol se deshace en el mar, lugar mágico y sagrado, vistas que se mezclan con la cultura, fin del mundo, leyendas y misticismo...

          Hace poco más de mil años, antes de que se descubriese el continente americano, se creía que aquí acababa el mundo, ya que estamos hablando del que se ha considerado el punto más alejado del continente europeo, del mundo conocido, y que desde el cabo no se divisaba más que el mar. Los más fantasiosos contaban que todo navegante que osase ir más allá de este punto sería devorado por unas bestias monstruosas que se encontraban en estos mares. Esta leyenda sucumbió ante el reto de Cristóbal Colón con la idea de que el mundo era esférico.


           El Cabo Finisterre es una península de tres kilómetros en la Costa da Morte en la que mires a donde mires (derecha, izquierda o al frente) solo verás mar, mar y mar. Al ser el punto más occidental de Europa, los romanos lo bautizaron como "finis terrae". Amén del descubrimiento del continente americano, en cierto modo el Cabo de Finisterre ha sido el lugar sagrado para los celtas y de renovación espiritual de la peregrinación del Camino de Santiago, quienes una vez llegados a Santiago, recorren los 90 kilómetros que separan la ciudad de Finisterre para ver "el fin del mundo", la última parada del antiguo camino, es por ello que aquí podemos encontrarnos el mojón con el "KM 0" del camino. 


          Es muy usual, una vez llegados allí, encontrarse con pequeñas hogueras de ropa quemada, o simplemente restos de ropa colgando de cruces o farolas muy cerquita del mar. Esto es una costumbre que realizan los peregrinos para purificarse, quemando alguna prenda de ropa que se haya usado durante algunas etapas del camino, se realiza como símbolo de renovación interior para todo peregrino que llega a este punto. Se quema lo viejo para dar cabida a lo nuevo. Esto hace de Finisterre no un simple lugar de finales sino también de comienzos.


          La luz actual del faro luce desde 1853 y cuenta con señalización acústica desde 1888, debido a la abundancia de nieblas que han llegado a hacer casi imperceptible la luz del faro, aunque ello no haya impedido los grandes naufragios que han tenido lugar en estos mares. El sonido que emite este faro es semejante al mugido de una vaca, de ahí que le denominen "a Vaca de Fisterre".


          Para los que lo deseen, en el cabo de Finisterre tienen la oportunidad de pasar una noche junto al faro, y es que hoy día el edificio anexo al faro es un pequeño hotel rural.



        Un territorio repleto de leyendas y mitos, en un ambiente donde la naturaleza, playas y paisajes bellísimos, enamorarán a cualquier visitante.



          Ya de vuelta a la capital nos dimos un paseo por la avenida marítima de Riazor. Con 13 kilómetros de largo es uno de los paseos marítimos más largos de Europa que rodea toda la península donde se extiende la capital coruñesa.




          Desde aquí podemos divisar el famoso estadio de Riazor, campo de fútbol del Real Club Deportivo de la Coruña. Si existe algún lugar en A Coruña para dar paseos inolvidables ese es este paseo marítimo. Tanto el estadio, el Castillo de San Antón o la Torre de Hércules, símbolo de la ciudad, son accesibles atravesando este paseo.





          El paseo bordea la costa, rodeando así la playa urbana de Riazor, y es que pocas ciudades pueden presumir de tener una playa como ésta, siempre preparada para broncearnos o darnos un chapuzón y con una ubicación bastante céntrica.





          Caminando en dirección a la Torre de Hércules desde el estadio, nos encontramos con el Aquarium Finisterrae, más conocido como la Casa de los Peces. Un gran centro donde se nos da la posibilidad de conocer el ecosistema marino de la costa gallega, el lugar ideal para pasar un rato agradable viendo y aprendiendo con la gran variedad de juegos interactivos que nos ofrece.





          Sin duda alguna los más pequeños fascinarán. En la sala Maremagnum existen varios módulos interactivos, donde se nos responde a preguntas como ¿por qué el agua del mar es salada? o ¿a dónde va el agua cuando baja la marea? Los niños aprenderán todo lo relacionado con el medio marino en un ambiente motivador y espectacular.





          En la enorme piscina exterior que posee este acuario se nos brinda la posibilidad de conocer la colonia de focas del Aquarium, descubriendo cómo se comportan en su hábitat natural. Se les alimenta dos veces al día, coincidiendo esos momentos con la mayor presencia de visitantes, atraídos por la curiosidad y atractivo de estas divertidas y juguetonas focas. Los monitores dan una pequeña charla al público que se acerque a verlas.






          Con estas simpáticas amigas nos despedimos de la capital coruñesa, muy alegres por todo lo vivido tanto en Galicia como en los destinos a los que se nos ha brindado la oportunidad de viajar gracias a la empresa TuBillete.com y a AirEuropa, quienes han hecho posible toda esta aventura vivida durante estos seis meses. Seis meses en los que hemos conocido mundo, hemos hecho amigos, vivido anécdotas, algunas buenas, otras mejores y alguna que otra que simplemente quedarán para el recuerdo. 

      Desde Santiago de Cuba casi a comienzos de la primavera, hasta Santiago de Compostela en pleno apogeo del verano, viviendo en medio un invierno bonaerense, hemos captado con nuestras cámaras las imágenes que les mostramos y de las que les hemos hecho partícipes. Y como en breve nos llega el otoño, se nos antoja que desde el "final de la tierra" a la puerta de entrada al "nuevo mundo", esta estación es la antesala de nuestro comienzo. 

          Israel y Kevin, Kevin e Israel, queremos agradecer de corazón a dos grandes empresas, a AirEuropa por la concesión de los vuelos y a todos los trabajadores de TuBillete.com por todas las gestiones realizadas, por los momentos que le hemos hecho pasar... unos divertidos, otros con algún quebradero de cabeza que esperamos sepan perdonarnos ¡jaja!. Y a ustedes, nuestros seguidores, compañeros y compañeras de viaje que nos han hecho sentir siempre bien acompañados.

        Sin más se despiden unos fieles servidores como de costumbre con un timelapse coruñés, esperamos que esto no sea un adiós sino un hasta luego y que podamos volver a brindarles y enseñarles el mundo... ¡A nuestra manera!. 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario