lunes, 22 de julio de 2013

En el corazón del museo sevillano

Del campo a la ciudad. Después de haber disfrutado de una jornada campera volvimos a la gran ciudad para conocer a fondo la historia, representada en la arquitectura, de Sevilla. La ciudad hispalense tiene un gran legado del cruce de culturas y pasear por sus calles es hacerlo por un museo sin límites. Comenzamos por el centro en el que se encuentra el Archivo de Indias, la Catedral, La Giralda, el Alcázar...


El Archivo General de Indias fue creado, tras el descubrimiento de América y elección de la capital andaluza como único puerto comercial del continente, para centralizar la documentación que hacía referencia a las colonias españolas. El Archivo era el único lugar donde se registraba todo y se conservan más de 43 mil legajos, una gran riqueza histórica que le valió para ser declarado en 1987 como Patrimonio de la Humanidad. Actualmente, también recoge varias exposiciones en su interior.







Enfrente se encuentra la Catedral de Sevilla, llamada Catedral de Santa María de la Sede de Sevilla. Se trata de la catedral gótica cristiana más extensa del mundo. No hay constancia cierta pero se data su inicio de construcción a principios del siglo XV y también fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1987, junto al Archivo General de Indias y los Reales Alcázares, además de Bien de Valor Universal Excepcional en 2010.



Si su fachada es impresionante, también lo es su interior, que recoge los restos mortales de Cristóbal Colón y varios reyes de Castilla. Después de conocer su interior y dar un paseo por el Patio de los Naranjos es recomendable hacer un esfuerzo y superar las 35 rampas y 17 escalones para subir hasta lo alto de la Giralda. Es la famosa torre y campanario de la ciudad, que gracias a sus 104 metros de altura, la hacen visible desde muchos puntos de la ciudad. El Giraldillo, una escultura cuyo nombre es Triunfo de la Fe Victoriosa, corona la Giralda. La panorámica de la ciudad desde lo alto de la Giralda es preciosa, pudiendo ver la extensión de este gran museo llamado Sevilla.












Tras bajar de su campanario lo mejor es visitar los Reales Alcázares, especialmente sus jardines. Catedral, Archivo de Indias y Reales Alcázares se encuentran prácticamente juntos por lo que es ideal dedicarle varias horas a esta zona con tanta riqueza histórica, arquitectónica y cultural. Los Reales Alcázares son un conjunto de palacios rodeados por una muralla fortificada que data de la Alta Edad Media, y supone el principal ejemplo del legado arquitectónico y artístico que ha propiciado el paso de diferentes culturas por Sevilla. De origen islámico, dio paso al mudéjar y gótico tras la conquista castellana y el renacentismo y barroco de sus sucesivas reformas. En su interior se encuentran los Jardines, de gran atractivo turístico, siendo uno de los mejores lugares por donde perderse para combatir el calor veraniego.










El tapeo y rica gastronomía nos esperaban una vez habíamos recorrido tantas rampas y escalones en la Catedral, paseado por los salones, palacios y Jardines de los Reales Alcázares y visitado el Archivo General de Indias.



El sofoco era insuperable, así que hicimos caso a las instituciones andaluzas y evitamos las horas puntas, las de máximo calor. Cuando menguaba el calor nos dirigimos a la Seta, así es popularmente conocido el Metropol Parasol. 


Con el atardecer, un paseo por el Barrio de Santa Cruz fue nuestra elección. Es uno de los barrios más populares de Sevilla, correspondiente con la antigua judería mediaval y posee un encanto sin igual. Transitar por el callejón del Agua, llegar hasta la Calle Vida, bordear las murallas y jardines más vetustos y precios de la ciudad o tomarse algo en sus innumerables restaurantes es una gozada.




Por la noche teníamos una visita que, sin duda, recomendamos. Desde hace poco más de un semestre se ha vuelto a retomar la visita nocturna a los Reales Alcázares y nosotros no dudamos en volver a este gran conjunto de palacios. Varios actores te introducen en una historia después de que el juglar te dé la bienvenida a este precioso lugar. La visita guiada con esta original idea debería extrapolarse a muchos museos, palacios, castillos y edificios con gran interés turístico porque te engancha de principio hasta el final en el que la te despide la reina Isabel II, rememorándote la vida e historia de los Alcázares.









Mañana será nuestro último día, en el que disfrutaremos de otro barrio popular y una divertida actividad por el Guadalquivir. ¡Nos leemos!



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