Tulum y Xel Ha, un placer para los cinco sentidos

Seguimos nuestra aventura en la Riviera Maya. Este miércoles, la guagua de Welcome Incoming Services nos recibía, puntuales como siempre, para llevarnos a nuestra segunda excursión en territorio maya. En TuBillete.com se preocupan porque conozcamos a fondo la cultura e historia de los lugares a los que nos desplazamos, disfrutando en todo momento y como no, con una dosis de aventura fiel al término TuBiAventura. Así que nos prepararon una espléndida excursión por Tulum y el parque de Xel Ha.

A la ciudad amurallada de Tulum llegamos en pocos minutos  puesto que el hotel está estratégicamente situado. Se trata del lugar escogido por la civilización maya para protegerse de invasores, debido a que además de protegerse al estar rodeado por un pantano y las aguas del Mar Caribe,  construyeron una muralla que les permitía defenderse de posibles ataques.

A los pies de esta construcción se encuentra, bajo un gigante acantilado, una magnífica playa de arena blanca en la que podrás darte un chapuzón y refrescarte de las altas temperaturas.

De sombra a sombra llegamos hasta la guagua para tomar rumbo a la segunda parada del día, Xel Ha. Un espectacular parque natural fiel a la sostentabilidad y defensor de la naturaleza que supone un auténtico placer para los cinco sentidos.

Allí nos esperaba Irasema que nos guió, con una sonrisa en todo momento y con muchísima simpatía, por todo el parque para llevarnos a todas las actividades y recovecos. Y es que en Xel Ha, no sólo podrás disfrutar de preciosas vistas, impecables cenotes e inmensas lagunas, sino que podrás introducirte en ellas animándote a la aventura.

Se trata de un formidable acuario natural con muchísimas especies que podrás divisar haciendo snorkel. Pero no sólo hay que mirar al fondo, sino también a los costados para poder salir del recorrido y animarte a practicar tirolinas, saltos de casi 5 metros de altura para los que tengan más valor y otras muchas actividades de cuerdas. ¡Fer se atrevió con todas! Bañarte en cuevas, convivir con varias especies de animales, como la abeja maya, y sentir la verdadera naturaleza en los 5 sentidos es, sin duda, una experiencia totalmente recomendable.

Y sí, decimos los 5 sentidos porque también tuvimos tiempo de degustar la exquisita comida mexicana.

Las 4 horas y media que estuvimos en sus instalaciones se nos pasaron volando; y en el ocaso llegamos al hotel en el que pudimos ver, de nuevo, al mapache. Un masaje en la playa escuchando las olas bañar la arena blanca de la costa caribeña completaría un día idílico, pero... hoy no era nuestro día de suerte y nos tuvimos que conformar con ver como se los daban a otro, pero ¡ya nos tocará! jeje

Agotados por querer exprimir hasta el último minuto de cada día nos retiramos deseando que vuelva a salir el sol en esta preciosa Riviera Maya y conocer más de su cultura, disfrutar de su naturaleza y seguir experimentando qué es vivir en plena selva. ¡A descansar! Eso sí, ahora en la cama y no en la hamaca jejeje